Mujeres que leen.
Una mañana, en un lago, un hombre que habìa salido a pescar,
regresa cansado y decide tomar una siesta.
Su mujer, que no sabia pescar, decide, sin embargo, tomar el bote
y se detuvo a cierta distancia, en un lugar ideal para continuar
leyendo su libro.
Enseguida se le presenta un guardiàn en su bote.
"Buenos dias, señora. Que està haciendo?"
"Leyendo un libro, no es eso obvio? "
"Usted esta pescando en un area prohibida"
"Yo no estoy pescando, estoy leyendo."
"Si, pero usted tiene todo el equipo necesario y
podrìa empezar en cualquier momento.
Tengo que llevarla y reportarla".
"Si usted hace eso, yo lo denuncio por
asalto sexual", respondiò la mujer.
"Pero si yo ni siquiera la he tocado", alega el
guardian.
"Es verdad, pero usted tiene todo el equipo
necesario y podrìa empezar en cualquier momento".
"Que tenga un buen dia, señora". Y con eso, desapareció.
La moraleja? Nunca discutas con una mujer que lee.
Su mujer, que no sabia pescar, decide, sin embargo, tomar el bote
y se detuvo a cierta distancia, en un lugar ideal para continuar
leyendo su libro.
Enseguida se le presenta un guardiàn en su bote.
"Buenos dias, señora. Que està haciendo?"
"Leyendo un libro, no es eso obvio? "
"Usted esta pescando en un area prohibida"
"Yo no estoy pescando, estoy leyendo."
"Si, pero usted tiene todo el equipo necesario y
podrìa empezar en cualquier momento.
Tengo que llevarla y reportarla".
"Si usted hace eso, yo lo denuncio por
asalto sexual", respondiò la mujer.
"Pero si yo ni siquiera la he tocado", alega el
guardian.
"Es verdad, pero usted tiene todo el equipo
necesario y podrìa empezar en cualquier momento".
"Que tenga un buen dia, señora". Y con eso, desapareció.
La moraleja? Nunca discutas con una mujer que lee.
Es seguro que también sepa pensar.
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